- Vamos a intentarlo de nuevo, dijo Angelina. Ella estaba ignorando a los Slytherins que ahora cantaban Gryffindor son perdedores, Gryffindor son perdedores. Pero había una cierta rigidez mientras estaba sobre su escoba.
Llevaban como tres minutos volando cuando el silbato de Angelina volvió a sonar. Harry, que acababa de ver la Snitch alrededor de los postes opuestos, se volvió y dijo:
- ¿Ahora que?, le dijo impaciente a Alicia, quien era la que estaba mas cerca.
- Katie, dijo brevemente.
Harry se volvió y vio a Angelina, Fred y George volando lo mas rápido que podían hacia Katie. Harry y Alicia también aceleraron hacia ella. Fue bueno que Angelina detuviera el entrenamiento justo a tiempo; Katie estaba tan blanca como una tiza y cubierta de sangre.
- Necesita ir a la enfermería, dijo Angelina.
- Nosotros la llevaremos, dijo Fred. Ella...eh...debió haber tomado un Blood Blisterpod por error.
- Bien, no tiene caso seguir entrenando sin bateadores y sin una cazadora, dijo Angelina apesadumbrada, mientras Fred y George regresaban al castillo llevando a Katie. Vámonos, vamos a cambiarnos.
Los Slytherins siguieron cantando mientras ellos regresaban a los vestidores.
- ¿Cómo estuvo la practica?, les pregunto Hermione fríamente media hora después, mientras Ron y Harry pasaban por el retrato hacia la Sala Común de Gryffindor.
- Estuvo. comenzó Harry.
- Completamente asqueroso, dijo Ron, hundiéndose en una silla al lado de Hermione. Ella miro a Ron y su frialdad desapareció.
- Bueno, solo fue tu primer entrenamiento, dijo ella consolándolo, solo es cuestión de tiempo para... ..
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- ¿Quién dijo que yo lo había hecho mal?, contesto Ron bruscamente.
- Nadie, dijo Hermione sorprendida, pensé....
- ¿Piensas que soy basura?.
- ¡Por supuesto que no! mira, tu dijiste que había sido un asco y yo solo pensé...
- Voy a empezar con las tarea, dijo Ron enojado y subió las escaleras hacia el dormitorio de los chicos, desapareciendo.
Hermione se volvió hacia Harry.
- ¿El fue un asco?
- No, dijo Harry lentamente.
Hemione levantó las cejas.
- Bien, supongo que pudo haber jugado mejor, murmuró Harry, pero era solo su primera sesión de entrenamiento...
Ni Harry ni Ron parecieron hacer muchos progresos en sus tareas esa noche. Harry sabia que Ron estaba muy preocupado por lo malo que había actuado en el entrenamiento de Quidditch y el mismo estaba teniendo dificultades para sacarse la canción, Gryffindor son perdedores, de su cabeza.
Estuvieron todo el domingo en la Sala Común sumergidos en sus libros, mientras que la habitación alrededor de ellos se iba vaciando lentamente. Era otro día claro y bueno y la mayoría de los de Gryffindor estuvieron todo el día afuera en los terrenos, disfrutando de lo que podría ser uno de los ultimas días de espléndido sol de ese año. Hacia la tarde, Harry sentía como si alguien hubiera golpeado su cerebro contra su cráneo.
- Sabes, deberíamos probar hacer mas tareas durante la semana, Harry le murmuro a Ron, mientras finalmente dejaba a un lado el largo ensayo para la Profesora McGonagall acerca del hechizo Inanimatus y empezaba con el igual de largo y difícil ensayo para la Profesora Sinistra acerca de las lunas de Júpiter.
- Si, dijo Ron, frotándose ligeramente sus ojos hinchados y arrugando su quinto pedazo de pergamino y tirándolo al fuego.
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¿Oye, y si le preguntamos a Hermione que nos deje ver lo que ella a hecho?.
Harry se volteo. Estaba sentada con Crookshanks en su regazo y charlando con Ginny mientras un par de agujas de tejer estaban a mitad del aire frente a ella, ahora tejiendo un par de calcetines para elfo.
- No, dijo el pesadamente, sabes que ella no nos va a dejar.
Siguieron trabajando mientras que el cielo afuera se volvía cada ves mas oscuro. Lentamente, la Sala Común comenzó a llenarse de nuevo. A las once y media, Hermione se acerco a ellos bostezando.
- ¿Ya casi acaban?
- No, dijo Ron brevemente.
- La luna mas grande de Júpiter es Ganimedes, no Callisto, dijo ella, señalando por encima del hombro de Ron una línea en su ensayo de Astronomía, y Io es la que esta cubierta de volcanes.
- Gracias, le contesto Ron de mala gana, borrando la línea ofendido.
- Perdón, yo solo...
- Si, bien. Si solo has venido para criticar...
- Ron...
- No tengo tiempo para escuchar un sermón, de acuerdo Hermione, estoy hasta el cuello...
- ¡No, mira!
Hermione apuntaba a la ventana mas próxima. Harry y Ron miraron. Una bonita lechuza blanca estaba parada en el alfiler de la ventana, mirando hacia Ron.
- ¿No es Hermes?, dijo Hermione, asombrada.
- ¡Si es!, dijo Ron tranquilamente, dejando su pluma y poniéndose de pie. ¿Para que me habrá escrito Percy?.