GUIANEYA
Gueorgui Martinov
Título original: Guianeya
Traducción: Justo Nogueira ©
Gueorgui Martinov © 1974
Editorial MIR - Moscú
Prólogo
1
Un círculo anaranjado-amarillo atravesado por una franja azul, se vio sobre la cinta de hormigón de la pista, cuando el vechebús se encontraba todavía a quinientos metros.
Inmóvil, de contorno bien definido, atravesado por los rayos solares que caían de un cielo despejado, brillaba como un sol que hubiera aparecido de repente sobre el mismo camino.
En el interior del vechebús resonó una voz que dijo:
— ¡Atención! Nos acercamos a la línea del sharex. El tren se encuentra a ciento diez kilómetros. ¡Los que quieran observar el paso del expreso que levanten la mano!
En los cómodos sillones del vechebús que no estaba ocupado ni en una cuarta parte, se encontraban sentadas treinta personas. Dieciocho pasajeros levantaron la mano.
Un sonido silbante, apenas perceptible, interrumpió la marcha silenciosa de la máquina.
Funcionaron los frenos. El vechebús se detuvo al pie mismo de la señal anaranjadoamarilla que se fue apagando poco a poco hasta desaparecer por completo como si se hubiera disuelto en el aire.
Aunque sólo dieciocho personas expresaron el deseo de ver pasar el expreso, de la máquina salieron todos los pasajeros. El sharex había aparecido hacía poco y el interés que podía despertar no se había convertido todavía en costumbre. Los habitantes de las ciudades no tenían la ocasión de ver con frecuencia el tren en la mitad de su trayecto, cuando la velocidad llegaba a los seiscientos kilómetros por hora.