Читаем Guianeya полностью

 — Según mi criterio esto no está mal, sino todo lo contrario — dijo Sinitsin —. Es necesario destruir no sólo a los satélites sino también sus bases. Entonces incluso no sospechábamos su existencia.

 — Destruirlos es fácil — dijo uno de los componentes de la Sexta expedición —. ¿Cómo encontrarlos? Lo hemos intentado seis veces. Stone se volvió hacia Murátov.

 — ¿Es posible — dijo — que usted intente hablar una vez más con Guianeya?

 — Por que no, pero pienso que es inútil. Me parece que Guianeya ha dicho todo lo que sabe. No le fue fácil el hacer esto. No puedo olvidar la expresión de su cara. Me alarma mucho la frase que pronunció: «Me he perdido, pero les voy a salvar a ustedes».

 — Indudablemente esta frase refleja una idea. Pero entre nosotros, en la Tierra, nadie amenaza a Guianeya. Por lo que se deduce ella ha querido decir que después de sus palabras tiene cerrado el camino a su patria. Sobre esto pensaremos todavía, y lo pensaremos bien. Más alarmante es la segunda mitad de la frase: «les voy a salvar a ustedes». ¿A qué se refiere?

 — Esto puede significar sólo una cosa — dijo Murátov — que los satélites llevan consigo una amenaza para la humanidad de la Tierra. No tendrían ustedes la menor vacilación si hubieran escuchado el tono con que ella dijo: «¡Destruyanlos!»

 — Yo no tengo la menor vacilación — respondió Stone —. La Séptima expedición lunar saldrá lo más pronto posible.

Pasadas unas horas Murátov habló largamente por el radiófono con su hermana.

Marina le dijo que en cuanto llegaron a casa Guianeya se acostó y rogó que no la molestaran.

 — Parece tranquila pero muy apenada. Algo la oprime, no la deja tranquila. Me parece que está arrepentida de haberse quitado la máscara.

 — ¿En qué idioma habla contigo? — preguntó Murátov.

 — En el suyo, como siempre. No me he decidido a hablar con ella en español.

 — No hace falta. Pronto ella misma hablará en español. ¡Lo verás!

 — Guianeya quiere marcharse hoy.

 — ¿A dónde?

 — Se lo he preguntado y me ha contestado que le es indiferente, sólo que lejos de aquí.

Da la impresión que quiere huir de sí misma y es posible que de ti.

 — Lo comprendo. Es la reacción de Guianeya que no tenía derecho a decir lo que dijo, y le atormenta el haber infringido las leyes de su patria. Pero tú misma oíste como ella dijo que hacía tiempo estaba decidida a hablar con franqueza y que se lo impidió mi ausencia.

¿Cómo explicar esto?

Marina no contestó en seguida.

 — Ahora está claro — dijo después de un minuto — por qué ella insistía tanto en verte.

Pero no comprendo por qué decidió decírtelo a ti. Es posible que tenga influencia tu parecido con ella.

 — Esta es una minucia y una circunstancia puramente exterior para que pueda desempeñar un papel destacado en una cosa tan importante. De esta forma se puede pensar que Guianeya me ama — Murátov se sonrió recordando la réplica de Sinitsin en el cohetódromo.

 — Es posible que esto sea así — respondió completamente seria Marina.

 — ¡Qué tontería! Alguna vez sabremos la causa del trato especial que me concede.

Este es otro enigma de Guianeya. ¿Entonces, os marcháis hoy?

 — Sí. Le he propuesto visitar las islas del Japón donde ella todavía no ha estado. Por primera vez Guianeya ha estado de acuerdo en ir en avión. Por lo visto quiere cuanto antes alejarse de aquí.

 — ¿Sería conveniente que os fuera a despedir?

 — Claro que no. Me parece que Guianeya no quiere verte. Es posible que me equivoque.

 — No te equivocas — dijo Murátov —. Lo pregunté maquinalmente, sin pensarlo. ¡Feliz viaje! Dos palabras más. Te predigo que Guianeya pronto de nuevo me recordará. Ha hablado y querrá, deberá querer, decir más.

Murátov desconectó el radiófono.

Los acontecimientos transcurrían a un ritmo veloz. ¡Qué pena no haber cumplido antes el deseo de Guianeya y haber esquivado tanto tiempo la entrevista con ella! La Sexta expedición lunar podría no haber vuelto con las manos vacías si la respuesta de la huésped la hubiera obtenido hace medio año.

Murátov estaba convencido de que comprendía justamente el estado en que ahora se encontraba Guianeya. Algo la obligó a infringir su silencio y esto lo hizo en el momento cuando se encontraba fuertemente agitada y algo que la intranquilizaba hizo, posiblemente, que lo realizara casi en contra de su voluntad. Ahora se arrepentía de esto.

Y si no se arrepentía le remordía la conciencia de «haber entregado» a sus compatriotas.

¿En qué consistía la traición?

Por lo visto era justa la suposición, cpe él manifestó a su tiempo, de que los satélitesexploradores habían sido enviados hacia la Tierra con objetivos hostiles, y eran un peligro.

De otra forma no se podían interpretar las palabras de Guianeya de que ella «salvaba» a las personas. Guianeya violaba los planes de su patria, traicionaba a sus compatriotas al aconsejar la destrucción de los satélites.

¿Qué la había obligado a hacer esto?

A Murátov ni siquiera le pasaba por la imaginación el que Marina pudiera estar en lo cierto al explicar de una forma tan sencilla el trato especial que mantenía con él Guianeya.

Перейти на страницу:

Похожие книги

Чужие сны
Чужие сны

Есть мир, умирающий от жара солнца.Есть мир, умирающий от космического холода.И есть наш мир — поле боя между холодом и жаром.Существует единственный путь вернуть лед и пламя в состояние равновесия — уничтожить соперника: диверсанты-джамперы, генетика которых позволяет перемещаться между параллельными пространствами, сходятся в смертельной схватке на улицах земных городов.Писатель Денис Давыдов и его жена Карина никогда не слышали о Параллелях, но стали солдатами в чужой войне.Сможет ли Давыдов силой своего таланта остановить неизбежную гибель мира? Победит ли любовь к мужу кровожадную воительницу, проснувшуюся в сознании Карины?Может быть, сны подскажут им путь к спасению?Странные сны.Чужие сны.

dysphorea , dysphorea , Дарья Сойфер , Кира Бартоломей , Ян Михайлович Валетов

Фантастика / Детективы / Триллер / Научная Фантастика / Социально-философская фантастика
Первые шаги
Первые шаги

После ядерной войны человечество было отброшено в темные века. Не желая возвращаться к былым опасностям, на просторах гиблого мира строит свой мир. Сталкиваясь с множество трудностей на своем пути (желающих вернуть былое могущество и технологии, орды мутантов) люди входят в золотой век. Но все это рушится когда наш мир сливается с другим. В него приходят иномерцы (расы населявшие другой мир). И снова бедствия окутывает человеческий род. Цепи рабства сковывает их. Действия книги происходят в средневековые времена. После великого сражения когда люди с помощью верных союзников (не все пришедшие из вне оказались врагами) сбрасывают рабские кандалы и вновь встают на ноги. Образовывая государства. Обе стороны поделившиеся на два союза уходят с тропы войны зализывая раны. Но мирное время не может продолжаться вечно. Повествования рассказывает о детях попавших в рабство, в момент когда кровопролитные стычки начинают возрождать былое противостояние. Бегство из плена, становление обоями ногами на земле. Взросление. И преследование одной единственной цели. Добиться мира. Опрокинуть врага и заставить исчезнуть страх перед ненавистными разорителями из каждого разума.

Александр Михайлович Буряк , Алексей Игоревич Рокин , Вельвич Максим , Денис Русс , Сергей Александрович Иномеров , Татьяна Кирилловна Назарова

Фантастика / Советская классическая проза / Научная Фантастика / Попаданцы / Постапокалипсис / Славянское фэнтези / Фэнтези
Время собирать камни
Время собирать камни

Думаешь, твоя жена робкая, покорная и всегда будет во всем тебя слушаться только потому, что ты крутой бизнесмен, а она — простая швея? Ты слишком плохо ее знаешь… Думаешь, что все знаешь о своем муже? Даже каким он был подростком? Немногим есть что скрывать о своем детстве, но, кажется, Виктор как раз из этих немногих… Думаешь, все плохое случается с другими и никогда не коснется тебя? Тогда почему кто-то жестоко убивает соседей и подбрасывает трупы к твоему крыльцу?..Как и герои романа Елены Михалковой, мы часто бываем слишком уверены в том, в чем следовало бы сомневаться. Но как научиться видеть больше, чем тебе хотят показать?

Андрей Михайлович Гавер , Владимир Алексеевич Солоухин , Владимир Типатов , Елена Михалкова , Павел Дмитриев

Фантастика / Приключения / Детективы / Научная Фантастика / Попаданцы / Прочие Детективы