« Sin embargo debo mencionar otra de sus pruebas favoritas, el Argumento de la Catástrofe. Un ejemplo típico que podría producirse incontables veces: unos adoradores de Alfa se reúnen para pedir ayuda ante la proximidad de un desastre; y todos mueren porque se derrumba su refugio, mientras que la mayoría de ellos se habrían salvado si se hubieran quedado en sus Casas.
« Los neomaniqueos reunieron volúmenes enteros de horrores de este tipo, como hospitales y residencias de ancianos incendiados, colegios de párvulos sepultados por terremotos, y volcanes o maremotos que destruyeron ciudades. La lista es inacabable.
« Naturalmente, los adoradores de Alfa rivales no se rindieron ante eso, y reunieron el mismo número de ejemplos contrarios, las maravillas que se habían producido, una y otra vez, para
« Este debate duró, en formas diversas, varios miles de años. No obstante, hacia el siglo XXI, las nuevas tecnologías de la información y los métodos de análisis estadístico, junto con una comprensión más amplia de la teoría de la probabilidad, ayudaron a encontrar la solución.
« Pasaron varias décadas antes de que aparecieran las respuestas, y tuvieron que pasar otras más para que fueran aceptadas por la casi totalidad de los hombres inteligentes: las cosas malas sucedían con la misma frecuencia que las buenas. Como ya se sospechaba desde hacía mucho tiempo, el universo simplemente obedecía a las leyes de la probabilidad matemática. Por supuesto, no había ningún signo de intervención sobrenatural, ni para bien ni para mal.
« De modo que el problema del mal nunca existió en realidad. Esperar que el universo fuera benévolo era como imaginar que uno pudiera ganar
« Algunos devotos intentaron salvar la situación fundando una religión que veneraba a Alfa el Supremo Indiferente, y utilizaron la curva acampanada de la distribución normal como símbolo de su fe. No hace falta decir que una divinidad tan abstracta no inspiraba mucha devoción.
« Y ya que hablamos de matemáticas, éstas infligieron a Alfa otro golpe aplastante en el siglo XXI (¿o fue en el XXII?). Un brillante terrícola llamado Kurt Godel probó que existían ciertos límites fundamentales absolutos del conocimiento, y así, la idea de un Ser Omnisciente—una de las definiciones de Alfa—era, por lógica, absurda. Este descubrimiento ha llegado hasta nosotros a través de uno de esos inolvidables malos juegos de palabras: « Con Godel, adiós Dios. » Los estudiantes solían escribir pintadas en las paredes con las letras D, I, O y la sigma griega, y, por supuesto, había versiones que decían: « Con Dios, adiós Godel. »
« Pero volvamos a Alfa. Hacia mediados del milenio, éste había dejado de formar parte más o menos de las inquietudes humanas. Prácticamente todos los hombres pensadores habían acabado estando de acuerdo con el duro veredicto del gran filósofo Lucrecio:
« Aún así, algunas de las viejas confesiones lograron sobrevivir, aunque con sus formas drásticamente alteradas, hasta el fin de la Tierra. Los Mormones del Ultimo Día y las Hijas del Profeta llegaron incluso a crear sus propias naves sembradoras. A menudo me pregunto qué habrá sido de ellas.
« Desacreditado Alfa, sólo quedaba Omega, el Creador de todas las cosas. No es tan sencillo deshacerse de Omega; el universo precisa una buena cantidad de explicaciones. ¿No estás de acuerdo conmigo? Existe un antiguo chiste filosófico que es mucho más sutil de lo que parece. Pregunta: ¿Por qué está aquí el Universo? Respuesta: ¿Dónde, si no, podría estar? Y pienso que esto es suficiente para una mañana.
— Gracias, Moses—contestó Mirissa, algo aturdida—. Todo esto ya lo habías contado antes, ¿verdad?
— Claro que sí, muchas veces. Y prométeme sólo una cosa.
—¿Cuál?
— No creas nada de lo que te he dicho por el mero hecho de que te lo haya contado yo. No hay ningún problema filosófico que llegue a solucionarse nunca. Omega sigue estando cerca, y a veces pienso lo mismo de Alfa…
VII. MIENTRAS LOS DESTELLOS VUELAN HACIA LAS ESTRELLAS
47. Ascensión
Su nombre era Carina, tenía dieciocho años, y aunque era la primera vez que estaba de noche en el barco de Kumar, no era, de ningún modo, la primera vez que estaba en sus brazos. De hecho tenía quizás el mayor derecho al muy disputado título de ser su chica favorita.