Читаем i c40a5069f5c85ef3 полностью

Muchos de los sentados alrededor de Yaxley parecieron impresionados; su contiguo, Dolohov, un hombre con una larga y encrespada cara, le palmeó la espalda.

“Es un comienzo,” dijo Voldemort. “Pero Thicknesse es solo un hombre. Scrimgeour debe estar rodeado por nuestra gente antes de que yo actúe. Un atentado fallido contra la vida del Ministro me hará retroceder un largo trayecto del camino.”

“Si... mi Se˜nor, eso es cierto... pero ya sabe, como Jefe del Departamente de Refuerzo de la Ley Mágica, Thicknesse tiene contacto regular no solo con el propio Ministro, sino también con los Jefes de todos los demás departamentos del Ministerio. Será fácil, creo yo, ahora que tenemos a un oficial de tan alto rango bajo nuestro control, subyugar a los otros, y después podemos trabajar todos juntos para someter a Scrimgeour.”

“Mientras nuestro amigo Thicknesse no sea descubierto antes de convertir al resto,”

dijo Voldemort. “En cualquier caso, parece improbable que el Ministerio vaya a ser m´ıo antes del próximo sábado. Si no podemos tocar al chico en su destino, debemos hacerlo mientras viaja.”

“En ese sentido tenemos ventaja, mi Se˜nor,” dijo Yaxley, que parec´ıa decidido a recibir CAPÍTULO 1. EL ASCENSO DEL SE ˜

NOR TENEBROSO

6

algún tipo de aprobación. “Ahora tenemos a varias personas dentro del Departamento de Transporte Mágico. Si Potter se Aparece o utiliza la Red Flu, lo sabremos inmediatamente.”

“No harán ninguna de las dos cosas,” dijo Snape. “La Orden está esquivando cualquier forma de transporte que esté controlada o regulada por el Ministerio; desconf´ıan de todo lo que tenga que ver con ellos.”

“Aún mejor,” dijo Voldemort. “Tendrá que salir a campo abierto. Mucho más fácil de coger.”

De nuevo, Voldemort levantó la mirada hacia el cuerpo que se revolv´ıa lentamente,

“Me ocuparé del chico en persona. Se han cometido demasiados errores en lo que a Harry Potter concierne. Algunos de ellos han sido m´ıos. Que Potter viva se debe más a mis errores que a sus triunfos.”

Los reunidos observaban a Voldemort aprensivamente, cada uno de ellos, por su expresión, temiendo que pudieran ser culpados por la continuada existencia de Harry Potter.

Voldemort, sin embargo, parec´ıa estar hablando más para s´ı mismo que para ninguno de ellos, todav´ıa dirigiéndose al cuerpo inconsciente sobre él.

“He sido descuidado, y por eso me he visto frustrado por la suerte y la oportunidad, demoledoras de nada más y nada menos que de los planes mejor trazados. Pero ahora estoy mejor preparado. Entiendo lo que no entend´ıa antes. Debo ser yo quien mate a Harry Potter, y lo haré.”

Ante esas palabras, aparentemente en respuesta a ellas, sonó un repentino aullido, un terrible y desgarrador grito de miseria y dolor. Muchos de los sentados ante la mesa miraron hacia abajo, sobresaltados, por el sonido que hab´ıa parecido surgir de debajo de sus pies.

“Colagusano,” dijo Voldemort, sin cambiar su tono tranquilo y pensativo, y sin apartar los ojos de cuerpo que se remov´ıa arriba. “¿No te he dicho que mantuvieras a nuestro prisionero tranquilo?”

“Si, m-mi Se˜nor,” jadeó un hombrecillo en mitad de la mesa, que hab´ıa estado sentado tan abajo en su silla que a primera vista, parec´ıa estar desocupada. Se revolvió en su asiento y salió a toda prisa de la habitación, no dejando tras él nada más que un curioso brillo plateado.

“Como estaba diciendo,” continuó Voldemort, mirando de nuevo a las caras tensas de sus seguidores. “Ahora estoy mejor preparado, necesitaré, por ejemplo, tomar prestada la varita de uno de vosotros antes de ir a matar a Potter.”

Las caras a su alrededor no mostraron nada menos que sorpresa; podr´ıa haber anunciado que quer´ıa coger prestado uno de sus brazos.

“¿Ningún voluntario?” dijo Voldemort. “Dejadme ver... Lucius, no veo razón para que sigas teniendo una varita.”

Lucius Malfoy levantó la mirada. Su piel parec´ıa amarillenta y cerosa a la luz del fuego, y sus ojos estaban hundidos y sombr´ıos. Cuando habló, su voz era ronca.

“¿Mi Se˜nor?”

“Tu varita, Lucius. Exijo tu varita.”

“Yo...”

Malfoy miró de reojo a su esposa, que estaba mirando directamente hacia adelante, CAPÍTULO 1. EL ASCENSO DEL SE ˜

NOR TENEBROSO

7

tan pálida como él, su largo pelo rubio colgaba por su espalda, pero bajo la mesa sus dedos esbeltos se cerraron brevemente sobre la mu˜neca de su esposo. Ante su toque, Malfoy metió la mano en la túnica, retirando una varita, y pasándosela a Voldemort, que la sostuvo en alto delante de sus ojos rojos, examinándola atentamente.

“¿Qué es?”

“Olmo, mi Se˜nor,” susurró Malfoy.

“¿Y el centro?”

“Dragón... nervio de corazón de dragón.”

“Bien,” dijo Voldemort. Sacó su propia varita y comparó sus longitudes. Lucius Malfoy hizo un movimiento involuntario; durante una fracción de segundo pareció como si esperara recibir la varita de Voldemort a cambio de la suya. El gesto no le pasó inadvertido a Voldemort, cuyos ojos se abrieron maliciosamente.

“¿Darte mi varita, Lucius? ¿Mi varita?”

Algunos de los miembros de la multitud rieron.

Перейти на страницу:

Похожие книги

Вперед в прошлое 2 (СИ)
Вперед в прошлое 2 (СИ)

  Мир накрылся ядерным взрывом, и я вместе с ним. По идее я должен был погибнуть, но вдруг очнулся… Где? Темно перед глазами! Не видно ничего. Оп – видно! Я в собственном теле. Мне снова четырнадцать, на дворе начало девяностых. В холодильнике – маргарин «рама» и суп из сизых макарон, в телевизоре – «Санта-Барбара», сестра собирается ступить на скользкую дорожку, мать выгнали с работы за свой счет, а отец, который теперь младше меня-настоящего на восемь лет, завел другую семью. Казалось бы, тебе известны ключевые повороты истории – действуй! Развивайся! Ага, как бы не так! Попробуй что-то сделать, когда даже паспорта нет и никто не воспринимает тебя всерьез! А еще выяснилось, что в меняющейся реальности образуются пустоты, которые заполняются совсем не так, как мне хочется.

Денис Ратманов

Фантастика / Фантастика для детей / Самиздат, сетевая литература / Альтернативная история / Попаданцы