Acariciolas ruinas tibias de la tarde.Astillas de sol oscuro,temblor, susurros, voluntad.Urdiré los secretosque han de dar nombrea todas las estrellas.Son mis dedosGolondrinasque el azul ensortijaentre el cielo y los campos.Equinoccio de otoño
(Cúmulo Omega Centauri)
Hay una miel nocturna queata al aire y lo engaña,recomponetramas de luz muy dulces.El pensamiento es la misióndonde agota la vidasus fuerzas.Y el mar es el espejoen que la Lunadescubre sorprendidasus colores de tizasolitaria.Señal de simetría
(Beta Centauri, estrella gigante azul)
Y cada copo de luzes una queja suavede los astros que pasan.Río abajo se dejacaer el cielo sobreel agua. Igual que tierra,la luz forma meandrosen la tarde sin flores.Una fuerza celesteacecha los placeresterrenales que el amorexhala. Nubes en elabismo de mi pechocon tiempo se preparan.Evolución de la forma
En el bosque, una golondrinaha prendido su vuelode las hebras de piedrade la Luna,mientras arde la nochey se deshace el Solhacia lo lejos. Ha encontradoun lecho de amor en mediodel tumulto de vida sofocanteque brota de la tierra.El pajarillollora sus lágrimasde cristal inhumanoen la tibieza embelesadadel estanque,en el agua.Quién sabe, ¿se entregaráese halo de sol, al cabo,como un gusanoque le cuelgue del pico?Pequeño cataloga de cielo profundo
No sueñes con otros mundos.
John Milton
De mí prefiero la parteque me asoma de los ojos, esedulce trabajo mío de otear más alláentrela púrpura ligera de las bardasque deshilan mi cuerpo, lazo a lazo,de carcomas de luz.Tanto mirar y he visto apenasun espacio anchoque le roba a la muertelas riendas de los sueñosque se inventan el tiempo día a díaporquecada minuto es un añicode vida que el otoñoimplora ante la primavera.La hipótesis del zoo
Un recuerdo del marpone su humedad gris en las montañas,esplendor de una velaque dibuja en las cimasel color de las nubessobre la piedra florecida.¿Y si se ausenta el cieloy deja solos a los astros?¿Y si soy sólo un pececilloque sueña que un día fueuna muchachatriste?Romance para una estrella
(de rock)
Diste a la mar monosílabaazul turquí para el agua,le diste verde al paisajey barniz a mis miradas.A las estrellas lejanas,alcoholetas de ginebra,damas de puerto malayo,les diste rock pa' las penasde amor por profundidadessubmarinas, marineras.¡Las estrellitas enfermasde altura, frío y cavernasestelares!…, agujeroscomo tus ojos en velaque metiste en un sombreroengolfándote en sus telas.Cenit
Nada existe excepto átomos y espacio vacío.
Todo lo demás son opiniones.
Demócrito de Abdera
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